Los
orígenes de la Liga Villamariense de Futbol
Los comienzos de la historia de Nuestra liga surgen como una necesidad
latente de tener "una casa propia"; una institución madre que
respaldara a todos aquellos equipos de futbol incipientes cargados de expectativas
y sueños. Fue así, en aquellas primeras reuniones en la calle Entre
Ríos 1057, en donde Jorge Hillar y Victorino Pisso de Unión Central,
Kube de Sarmiento, Montagner del San Martín y Nicolás Hillar, representante
del Instituto Sarmiento dieron origen en el año 1914 a la anhelada estructura
orgánica del fútbol villamariense.
Hacer un balance durante
los 25 años posteriores no es tarea sencilla: caras repetidas en reuniones,
cuatro o cinco clubes manifestando un trabajo comprometido, más la sumatoria
de grupos de futbolistas jóvenes entusiasmados, dieron como resultado la
ardua consolidación de la institución.
A partir de 1938
nuevos aires soplaron con el cambio de autoridades, abriendo el juego con la incorporación
de nuevos equipos de la zona. Sumado a ello la liga tomaba impulso y envergadura
como institución, paralelamente a la fundación de nuevos clubes.
La hora más gloriosa llegó cuando se afiliaron los Clubes de
barrio en 1945, junto a dos de Villa Nueva, conformando una decena de escuadras,
monopolizadoras por casi veinte años del espectáculo deportivo excluyente
de Villa María y aportando extraordinarios jugadores al futbol profesional.
Aciertos y errores, seguramente muchos; pero sin lugar a dudas uno de los
logros alcanzados más importantes de la institución, fue la inauguración
el 18 de febrero de 2001de la sede propia, ubicada en Tucumán y 25 de Mayo.
Dicho proyecto fue gestado por Darío Ranco, en la asunción de su
presidencia en el año 1998. Luego, tres años después, bajo
la gestión encabezada por Carlos Airaldi, se logró la concreción
de un sueño: un espacio propio del fútbol villamariense.
Hoy, en vísperas de nuestro centenario, todos los que formamos parte de
este proyecto: dirigentes, árbitros, periodistas, simpatizantes, familias
y jugadores, todos los que creemos y seguimos apostando al fútbol local,
nos enorgullecemos por seguir construyendo la LIGA
VILLAMARIENSE DE FÚTBOL.